Shame
Shame bien podría ser la película más estimulante del pasado año. A muchos niveles. En su segundo trabajo como director, Steve McQueen filma una cinta subyugada al placer, pero también al odio, al dolor
Shame bien podría ser la película más estimulante del pasado año. A muchos niveles. En su segundo trabajo como director, Steve McQueen filma una cinta subyugada al placer, pero también al odio, al dolor